lundi 17 janvier 2011

SABERES EN MOVIMIENTO


Reflexiones en Torno a la Educación
Luz María Chapela, Nostra Editores, México, 2007
Ante el fracaso de la educación en nuestro país, surgen voces valientes, como la de Luz María Chapela, quien afirma que se debería tomar un rumbo diferente y empezar a replantearse seriamente el cómo y el por qué.  
¿Estamos preparando de manera eficaz a las nuevas generaciones para afrontar los retos del futuro?  Aún aquellos del futuro inmediato, ya no responden a la educación tradicional.  
Cuando leí por primera vez este libro, hace tres años, no pude dejarlo ni un minuto, tan apasionantes me parecieron sus planteamientos y tan amena su lectura.  En aquel tiempo, yo estaba en plena escritura de mi libro sobre el Tutelar para menores, y en pleno trabajo dentro de la misma institución.  Darme cuenta de que alguien proponía caminos y soluciones distintos, me animó y me dio energía para seguir en la vía que me había propuesto.  
¿Por qué la educación en México es tan deficiente que nos da la impresión de que los niños no aprenden gran cosa?  ¿Por qué los jóvenes universitarios no saben redactar un texto, ordenar ideas, hacer crítica?  ¿Por qué nuestra educación promueve la obediencia, el inmovilismo, la imitación, el aprendizaje de memoria, la absorción mecánica de los contenidos?
¿Dónde están la imaginación, la iniciativa, el pensamiento crítico, la creatividad, la acción?
“Las personas y sociedades, en contacto con la realidad que cambia y de acuerdo con nuestras identidades que también cambian, somos las que creamos y recreamos de manera constante nuestras verdades”
Es evidente que en este nuevo siglo, necesitamos de nuevas competencias frente al cambio, entre ellas  
creo yo, la crítica que juega un rol tan importante en otras culturas y que en México está tan desprestigiada.  Y como bien lo indica Chapela, el pensamiento complejo, ese que hace que veamos la realidad desde muchos ángulos y que la analicemos como muchas realidades.  Para el pensamiento crítico y para el pensamiento complejo se necesita imaginación, mucha imaginación... Imaginar no es exactamente lo que más se estimula en la escuela.  Miremos a nuestro alrededor: la escuela no provee a los niños de herramientas como la búsqueda, la investigación, la creatividad, la capacidad de cuestionar.  Dice Chapela: “...quien piensa con pensamiento complejo construye un apetito por lo inusitado, lo improbable y lo sorprendente; busca información y relaciona los datos con pensamiento crítico para convertirlos en conocimiento.”(p. 45)
La ciencia es algo cambiante.  Las artes también.  El conocimiento no es el mismo que hace veinte años, y aún menos que hace un siglo o dos.  A partir de esta premisa, Chapela aborda diferentes disciplinas para demostrarnos a lo largo de su libro, que tiempo e historia, identidades y diversidad, autonomía, pensamiento complejo, espacio público, etc. deben abordarse desde una perspectiva completamente diferente a la acostumbrada en la escuela.  “Resulta evidente que necesitamos buscar los contenidos de conocimiento que nos están haciendo falta dentro de una matriz interdisciplinaria... llegó el momento de que las academias participen en otras y más pertinentes construcciones alternativas.  La nueva tarea de la pedagogía es convertirse en canal de comunicación entre la ciencia y las sociedades...” (p. 12)  Es evidente que las academias son necesarias, pero también es necesario plantearlas desde un punto de vista diferente, el de la experiencia y el de lo interdisciplinario.
“Nadie puede dar el conocimiento a otro.  Las personas y los grupos necesitamos construir nuestro propio conocimiento a partir de la experiencia, a partir de la relación con el mundo y con los otros.” (p. 76)  
Por otro lado, Saberes en Movimiento nos ayuda a entender la educación como una herramienta para combatir la exclusión, combate esencial si deseamos que nuestras sociedades evolucionen.  Asumir el cambio no como una amenaza sino como un elemento del conocimiento y de la vida.  La autora nos muestra que mientras más y mejor aceptemos el cambio y lo vivamos como parte de nosotros mismos, más fácil nos será adaptarnos y actuar en este mundo complejo. Entender la realidad, tener un rol activo en ella, intervenir en la sociedad y en los procesos políticos contra las exclusiones: “El estado,  además de ser una entidad protectora y lejos de ser una entidad paternalista, tendría que ser una entidad propiciadora, instrumentadora y detonadora de procesos autónomos, críticos y prospectivos”
Es difícil decir cuáles capítulos me gustaron en particular pues creo que el libro es un todo que aborda tanto las ciencias humanas como las ciencias exactas, y a pesar de que yo no soy muy ducha en estas últimas, me parece que su manera de ligarlas con la realidad educativa es a la vez accesible e innovadora.  Chapela no necesita de un lenguaje rebuscado para expresarnos cosas por demás complejas:  “Algunos educadores hablamos hoy de competencias, es decir, hablamos de un sistema formado por conocimientos, habilidades y actitudes que juntos y puestos en acción permiten a las personas y a los grupos responder con eficiencia, de maneras nuevas y creativas a los retos (también nuevos) que la realidad les propone” (p. 14)
“... consideremos la salud como un estado que, además de conservar la vida y mantener a raya las enfermedades, produce y acumula energía suficiente para pensar en proyectos, diseñarlos, planearlos y emprenderlos con los conocimientos... y medios necesarios.”   Creo que este es un libro saludable, y lo recomiendo como esencial para quien trabaja en la educación y se interesa en que algún día nuestro sistema educativo evolucione y produzca ciudadanos críticos, creativos y eficaces.    

1 commentaire:

  1. Es una excelente crítica fundada con bases epistemológicas, (teoría del conocimiento),axiológicas (valores), y entomológicas, es decir en cuanto nuestra realidad y nuestro ser como pueblo. Por supuesto que hace falta un cambio paradigmático, se vienen arrastrando una educación improvisada y la corrupción ha permeado todas las esferas sociales y sus instituciones desde hace muchas décadas,los intereses reales objetivos son coptados por intereses medrosos. Todos los avances en educación prácticamente no se usan en un sistema que sólo le interesa mantener ideologías en torno al poder y la silla presidencial, todo lo demas funciona por inercia. Vale la pena leer el libro y poner en marcha los cambios

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